El punto más occidental de la Europa
Con una cercanía poco usual a una gran metrópoli como Lisboa, el Parque Natural Sintra-Cascais ha conseguido preservar todo el territorio que rodea el extremo occidental del continente europeo, así como la coexistencia armónica de la presencia humana con la naturaleza, lo que, al estar tan cerca de la capital, se podría haber vulnerado.
En toda su extensión, el Parque presenta una asombrosa diversidad de ambientes y paisajes, que incluye dunas, bosques, lagunas, una accidentada orla costera, con encantadoras playas entre altos acantilados, el impresionante Cabo de Roca y, en el centro, la magnífica Sierra de Sintra y toda el área clasificada por la UNESCO, como paisaje cultural Patrimonio de la Humanidad. En cuanto a fauna, flora y geomorfología, esta área es especialmente rica y variada.
Alrededor del afloramiento volcánico de la Sierra de Sintra sobre terrenos de origen basáltico, granítico y calcáreo, crecen numerosas especies arbóreas y arbustivas, entre las que todavía podemos encontrar ejemplares de la flora primitiva, como el roble-cerquiño, la carrasca y la muy característica “saudade” (armeria pseudarmeria), endémica de la flora portuguesa.
Entre los animales son bastante abundantes el conejo salvaje, el zorro, el “peneireiro-de-dorso-malhado”, el tejón, la comadreja, la cobra-ratonera y decenas de especies de aves, entre las que destacan algunos ejemplares únicos del águila-de-Bonelli y del halcón peregrino.